Desafíos del sector farmacéutico e impacto de la transformación digital
Las nuevas tecnologías tienen el enorme potencial de transformar la forma en que hacemos las cosas hoy en día y sin duda, dentro de un sector tan clave como el farmacéutico, existe una gran área de oportunidad e impacto.
Impulsar las sinergias, incrementar la cultura de innovación, mejorar la seguridad de las actividades de la organización e incluso, reducir costes son algunas de las ventajas que el sector farmacéutico puede adquirir al hacer frente a la obsolescencia tecnológica. En este sentido, ya existen casos de éxito como el de Novartis, que reciente- mente anunció su colaboración con Amazon Web Services para hacer uso de sus tecnologías para mejorar su producción y reducir costes en sus operaciones.
Partimos de la base de que el sector farmacéutico cuenta en algunos casos con lo que podríamos considerar una cierta obsolescencia digital debido a la falta de sistemas tecnológicos modernos y actualizados, pero entre otras cosas, porque la resistencia al cambio dentro del sector, la elevada regulación a la que está expuesta la industria y las diversas normativas que debe cumplir hacen que sea difícil la entrada de la tecnología al sector. Si a esto sumamos que la diversidad del ecosistema de la industria farmacéutica (fabricantes, distribuidores, hospitales, farmacias, etc.) combinada con la falta de estándares comunes y sistemas fragmentados tampoco ayuda a la implantación de la tecnología dentro del sector, encontramos un panorama complejo.
La Inteligencia Artificial (IA) que hoy en día está en boca de todos, puede acelerar y optimizar el proceso de descubrimiento de fármacos y los ensayos clínicos mediante el análisis de datos y patrones, pero es que además puede mejorar y agilizar los diag- nósticos médicos e incluso, puede llegar a ayudar en la personalización de tratamien- tos de pacientes tomando en cuenta aspectos que hoy en día ni siquiera se nos pasan por la cabeza como los datos genéticos. Esto por no mencionar otros aspectos donde el cambio puede ser de 180 grados, por ejemplo, en cuanto a experiencia y atención al paciente y, sobre todo, en todo lo relacionado con las tareas administrativas como el procesamiento de datos, la gestión de inventarios y la documentación, tareas que suelen demandar más tiempo del que se tiene.
En cualquier caso, el sector farmacéutico debe analizar los siguientes puntos a la hora de incluir el uso de nuevas tecnologías dentro de su plan de transformación digital:
Regulación y cumplimiento normativo
El alto grado de regulación en el sector farmacéutico es esencial para garantizar la se- guridad y eficacia de los medicamentos que se comercializan en el mercado. Su complejidad se debe a la necesidad de equilibrar la innovación y la seguridad, aunque es un proceso que ralentiza los avances. Sin embargo, la realidad es que estos avances tecnológicos, más que poner en peligro al sector pueden ayudar a conseguir mejoras importantes en cuanto a producción y distribución de fármacos, mejora y trato del paciente, seguridad en los procesos y de la información entre otras muchas cosas. Además, la digitalización puede requerir cambios significativos en la forma en la que las empresas operan para cumplir con estas regulaciones, lo que puede ser costoso y llevar tiempo. A pesar de esto, es importante reconocer que la implementación de tecnologías digitales puede traer beneficios muy significativos al sector, permitiendo una mayor eficiencia en los procesos y un mejor uso de los datos.
Integración de sistemas y datos
Uno de los principales retos del sector es ser capaces de administrar todo el volumen de datos e información de valor y confidenciales que se encuentran dentro del ecosiste- ma, especialmente si son antiguos o incompatibles. Tan importante es la integración y las sinergias de información y datos como la protección de estos. Es aquí donde la tec- nología tiene mucho que decir y hacer. No cabe duda de que tecnologías como la Dis- tributed Ledger Technology, en especial la Blockchain, pueden proteger la seguridad de la información y por tanto la de los diferentes players. Contar con sistemas integrados es clave y facilita la gestión de procesos, la interpretación y la toma de decisiones entre otras cosas.
Seguridad cibernética
La ciberseguridad es uno de los principales riesgos en la actualidad y no parece que esto vaya a cambiar en el futuro. A la industria farmacéutica le está resultando difícil encontrar perfiles de ciberseguridad en comparación con otros sectores, incrementándose los tiempos de los anuncios de empleo para es- tos puestos en más de un 25% según datos de GlobalData. Además, se estima que de cara a 2024 exista una necesidad de 83.000 puestos de trabajo relacionados con la ciberseguridad, según el “Análisis y Diagnóstico del Talento de Ciberseguridad en España” realizado por INCIBE. Esta es una necesidad real y cada vez más urgente donde hay que poner el foco de cara a minimizar los daños y los riesgos.
Además, cuando hablamos del sector farmacéutico esto adquiere una importancia mucho mayor, ya que la información que la industria maneja está estrechamente rela- cionada con datos clínicos y avances tecnológicos y científicos, algo que en las manos equivocadas puede ser una potente amenaza. Si a esto sumamos el avance acelerado de la transformación digital y la poca capacidad de respuesta en materia de cibersegu- ridad de las organizaciones en general y de la industria farmacéutica en particular, el escenario es preocupante. La digitalización de la empresa debe venir acompañada de un refuerzo de la ciberseguridad de la organización e incluso la formación de las personas.
Costes asociados
Se suele cometer el error de hablar de los costes desde el punto de vista de la inver- sión en nuevas tecnologías, pero el enfoque correcto debería ser las implicaciones e impacto que tiene el no incorporarlas. En materia de ciberseguridad son cada vez más los casos de empresas que tienen que pagar importantes sumas de dinero para dar res- puesta a problemas y fallos de seguridad. Además, se estima que para el año 2025 los costes económicos relacionados con los ciberataques asciendan a los 10 billones de dólares, sin contar con los daños intangibles, como puede ser el daño a la reputación de la compañía y a la relación con sus partners. La identificación de las necesidades y objetivos específicos de la empresa, así como la evaluación de las capacidades y recursos disponibles, son pasos iniciales cruciales en el proceso. Una vez establecidos, se pueden definir las tecnologías adecuadas para respaldar las metas empresariales y mejorar la eficiencia operativa.
En un mundo cada vez más impulsado por la tecnología, es imperativo para las empre- sas abordar la transformación y evolución tecnológica de manera cuidadosa y planifi- cada. Ante la complejidad y las implicaciones asociadas con este proceso, resulta esencial establecer un plan definido que permita comprender la secuencia de acciones y los hitos a alcanzar. Asimismo, es fundamental considerar tanto los aspectos relevantes como los menos relevantes, adoptando un enfoque estratégico y desarrollando planes integrales que contemplen las diversas facetas y realidades que acompañan a la tecnología.
José Antonio Pinilla Pérez
CEO & Chairman en Asseco Spain Group