La reinvención del sector turístico en 2021
Me parece especialmente interesante contemplar, ya en 2021, lo que podemos comenzar a llamar de forma cada vez más pragmática la “reinvención del turismo”, que, en mi modesta opinión, ya llevaba proponiendo una entidad como SEGITTUR desde principios de la década pasada a través del concepto de DTI (Destino Turístico Inteligente).
¿De dónde venimos?
Como acabo de citar, allá por 2012 aproximadamente, la Comisión Europea puso en marcha la iniciativa “Ciudades y Comunidades Inteligentes”, y SEGITTUR proponía el concepto de DTI, que venía a decir lo siguiente:
“El Destino Turístico Inteligente es un destino turístico innovador, consolidado sobre una infraestructura tecnológica de vanguardia, que garantiza el desarrollo sostenible del territorio turístico, accesible para todos, que facilita la interacción e integración del visitante con el entorno e incrementa la calidad de su experiencia en el destino y mejora la calidad de vida del residente”.
El proyecto DTI, pionero a nivel internacional, está liderado por la Secretaría de Estado de Turismo e impulsado y gestionado por SEGITTUR, cuyo objetivo no es otro que el de implantar un nuevo modelo de mejora de la competitividad y desarrollo turístico basado en la gobernanza y la corresponsabilidad turística.
Esta iniciativa, surgida del Plan Nacional e Integral de Turismo 2012-2015, genera los mecanismos adecuados para facilitar la rápida incorporación de innovaciones en los destinos.
La transformación en un Destino Turístico Inteligente supone la revalorización del destino a través de la innovación y la tecnología resultando de ello fundamentalmente:
- Un aumento de la competitividad, gracias al mejor aprovechamiento de sus recursos turísticos y a la identificación y creación de otros.
- Una mejora en la eficiencia de los procesos de producción y comercialización. Un impulso al desarrollo sostenible del destino en sus tres vertientes: medioambiental, económica y sociocultural.
- Una mejora de la calidad de la estancia de los visitantes y de la calidad de vida de los residentes.
- Hacer de la estrategia turística la base para la dinamización económica del territorio garantizando sus efectos positivos en el largo plazo.
Curioso, ¿verdad? Suena casi a 2021. Desde entonces, en los últimos años, y hasta 2019, se debían haber implantado menos de 50.
Como vivimos en un modelo inmovilista basado en ese ya clásico mantra “a mí como se hacían las cosas hace 10 años me va bien”, donde han predominado los intereses particulares, respecto de los generales, los de la gran empresa, respecto a los de las pymes (recordemos que suponen más del 90% de nuestro tejido empresarial), y todo ello aderezado con la ya consabida y tradicional corrupción española, no nos ha interesado ponerlo en valor hasta que finalmente, como diríamos en España: “nos ha pillado el toro”.
¿Y en qué me baso para afirmar esto?, Por un lado, en experiencias personales, y por otro en experiencias colectivas. Algunos datos avalan esta reflexión, por ejemplo:
A finales de 2017, España lideraba el ranking de países que habían pagado más multas por incumplir la normativa comunitaria. Desde 2012 hasta 2017, habíamos pagado 7 de cada 10 euros que la Comisión había ingresado de los países miembros en concepto de sanciones (unos 54 millones de euros, por los 10 millones de Bélgica, y los 5,5 millones de Grecia, segundo y tercero respectivamente).
A fecha del 30 de junio de 2020, España sólo había gastado el 34% de los fondos estructurales y de inversión europeos de 2014-2020, según los datos de Bruselas. Es decir, un total de 19.250 millones de euros de los 56.291 millones que le corresponden.
¿A dónde vamos?
El 27 de febrero de 2019, se constituía la Red DTI, que tiene como objetivo promover un nuevo marco de referencia para consolidar la competitividad del modelo turístico español.
La Comisión Ejecutiva de la Red está presidida por el Secretario de Estado de Turismo, y cuenta con tres vicepresidencias: una de organización que recae sobre el presidente de SEGITTUR; y dos institucionales representadas por la FEMP y Red.es; así como con ocho vocalías representadas por ocho destinos (Benidorm, Calvià, Donostia, Pontevedra, Arona, Palencia, Avilés y San Bartolomé de Tirajana).
Recientemente la Red ha incorporado 30 nuevos destinos, con lo que suma ya 179 miembros, cuadruplicando de esta manera su tamaño desde que se constituyó en 2019.
No conforme con esto, dentro de la Agenda España Digital 2025 se recoge lo siguiente:
“Turismo inteligente: se acelerará la transformación digital de la actividad turística para mantener el liderazgo competitivo de España en un mercado global, aumentar la contribución del turismo a la economía digital y elevar la resiliencia de la actividad turística mejorando la seguridad sanitaria, la sostenibilidad, la calidad de los servicios públicos turísticos y la digitalización e incremento de la productividad del tejido empresarial turístico.”
“El Gobierno impulsará un Proyecto Tractor para acelerar la digitalización de los destinos turísticos españoles y sus empresas, principalmente pymes. El objetivo es mantener la posición de liderazgo global de España en el sector turístico mediante la actualización de su capacidad competitiva en un mercado digital, la reducción de la brecha digital en la base del sector (destinos y pyme) y la dotación de herramientas tecnológicas necesarias para la evolución de la actividad turística hacia modelos sostenibles.
Este Proyecto Tractor contemplará el desarrollo del soporte tecnológico de plataformas digitales para la provisión de datos y servicios comunes basados en la interoperabilidad y la dotación de habilidades digitales a administraciones locales. Asimismo, se impulsará el desarrollo y adopción de herramientas basadas en la Inteligencia Artificial o el Internet de las Cosas (IoT), y la creación de un ecosistema de datos que permita adecuar la propuesta de valor turística a las exigencias del mercado y aumentar la eficiencia de la gestión turística local, ajustando los servicios públicos turísticos a la presión turística.
Junto a los agentes territoriales y empresariales, el proyecto se desarrollará en coordinación con el programa de Destino Turístico Inteligente y será consistente con la futura Estrategia de Turismo Sostenible de España 2030 y la Agenda Urbana de España.”
En lo que a mi experiencia personal se refiere, en los 10 años que llevo trabajando en Asseco Group, jamás había escuchado hablar de DTI, ni de Turismo Inteligente profesionalmente. Sin embargo, tan solo en el último medio año, la demanda por parte de los Operadores de Telecomunicaciones ha crecido exponencialmente para las DTI de destinos como Salou, Granada o Roquetas de Mar.
No podemos dudar que nos encontramos ante un gran cambio de paradigma dentro del sector turístico. Algo que llevaban proponiendo Europa y SEGITTUR desde principios de la década pasada, y que tanto el Covid-19 como los fondos europeos han acelerado durante el año 2020, y continuará haciéndolo a lo largo de los próximos años.
Javier Rubio
Head of Retail & Hospitality
Asseco Spain Group