Presente y futuro en el sector tecnológico: una visión desde el departamento de RRHH

Sin duda, el sector tecnológico sigue siendo uno de los más importantes por su capacidad para generar empleo. Perfiles de desarrollo web, desarrollo back-end, desarrollo de videojuegos, especialistas en big data o blockchain, expertos en ciberseguridad, etc., son ofertas habituales en los principales portales de empleo.

Son múltiples los estudios que analizan la creación de empleo y LinkedIn parece augurar que en los próximos 5 años se crearán dos millones de empleos relacionados con la tecnología, especialmente en el área de desarrollo de software.

Si bien estos datos son positivos en un momento en el que la tasa de paro en enero 2022 era del 12’7%, en las empresas tecnológicas seguimos teniendo una oferta laboral mayor a la demanda existente, implicando que en ocasiones se quedan vacantes por cubrir.

Así, el sector tecnológico se convierte en el ámbito profesional del presente y futuro para aquellas personas que quieran trabajar en un entorno en auge y a la vez, capaz de ofrecer una carrera laboral estable.

Lo interesante de este sector es que cualquier persona con interés por la tecnología puede tener su oportunidad profesional, ya que existen opciones para quienes quieren iniciar su carrera profesional pero también para aquellos que sienten la necesidad de reinventarse profesionalmente tras años de experiencia profesional. Para quienes tienen perfiles técnicos, pero también para quienes no. Y, sobre todo, este sector es un ámbito donde fácilmente la diversidad e integración de las personas, independientemente de su edad, género u otros aspectos personales, es un hecho.

Lo que tienen en común todas las personas que apuestan por desarrollarse en el sector tecnológico, es un interés por seguir aprendiendo. Es cierto que gracias a internet se ha democratizado el aprendizaje técnico pero no debemos olvidar que cada vez hay más oferta académica, no solo en universidades donde se ofertan grados como Ingeniería de Computadores, Ingeniería Informática, Ingeniería en Sistemas de Información o Ingeniería en Sistemas de Telecomunicación, etc, sino también en Centros de Formación Profesional donde se puede estudiar Técnico Súper en Desarrollo de Aplicaciones Multiplataforma o Técnico Súper en Desarrollo de Aplicaciones Web o en entidades como Fundación GOODJOB (Fundación GoodJob (fundaciongoodjob.org)), centro que promueve la empleabilidad de personas con discapacidad y en el sector de la ciberseguridad, big data e inteligencia artificial.

Todas estas formaciones, al igual que otras de especialización, o los cada vez mejor valorados bootcamps, nos capacitan desde un punto técnico, aunque es esencial ser consciente de que estos conocimientos deben reciclarse y adecuarse a las necesidades que van surgiendo.

Por otra parte, es importante destacar que nuestras habilidades personales influyen en nuestra oportunidad para aportar valor diferencial en las organizaciones.

Los responsables de equipos valoran nuestra capacidad para trabajar en equipo, aunque también nuestra autonomía, capacidad para trabajar bajo presión, planificación y capacidad para aprender rápido, y estas competencias se pueden apreciar tanto en perfiles jóvenes y con potencial como en personas con una experiencia profesional consolidada por los años.

Cada vez se demandan más perfiles de expertos en sector comercial o administrativo que se reinventan adquiriendo conocimientos tecnológicos y que, por tanto, se convierten en perfiles híbridos: key account manager en soluciones tecnológicas, comerciales internos, especialistas en contabilidad y finanzas, y por supuesto, en RRHH o marketing.

Y es que no sólo buscamos perfiles técnicos sino personas de departamentos corporativos.

Apostar por desarrollar una carrera profesional en el sector tecnológico, es apostar sobre seguro.

María Coloma Almiñana

Chief Human Resources Officer

Asseco Spain Group